Educación en Argentina: qué revela el informe sobre las pruebas aprender

Desde 2016, las pruebas Aprender se han establecido como una herramienta clave para evaluar el desempeño educativo en Argentina.

Con una aplicación anual y alternada entre niveles primario y secundario, estas evaluaciones han mejorado su cobertura en primaria, aunque la secundaria aún enfrenta desafíos: 1 de cada 4 estudiantes no participa, afectando la representatividad de los resultados.

Resultados: bajos desempeños y brechas persistentes

Matemática en secundaria: 8 de cada 10 estudiantes no alcanzan los niveles esperados.
Lengua: Aunque muestra leves avances en secundaria, no ha recuperado los niveles prepandemia.
Desempeño de excelencia: Solo entre el 1% y el 3% de los estudiantes logran niveles avanzados, con cifras más bajas en pruebas internacionales.

La brecha socioeconómica sigue siendo alarmante: estudiantes del nivel más alto superan por 29 a 36 puntos a los del nivel más bajo, una diferencia que ha aumentado en Lengua.

Desafíos técnicos y representatividad

El informe señala diferencias entre los resultados de Aprender y pruebas internacionales como PISA. Además, enfatiza la necesidad de una mayor participación estudiantil, especialmente en secundaria, para garantizar datos más representativos.

Recomendaciones para fortalecer las pruebas

Los expertos proponen medidas para mejorar la utilidad de las evaluaciones:

Reforzar la previsibilidad: Establecer de manera sistemática qué materias y grados se evaluarán.
Diversificar indicadores: Ampliar los datos más allá de los aspectos negativos.
Fortalecer capacidades provinciales: Reducir la dependencia de las jurisdicciones respecto al gobierno nacional.
Aumentar la comparabilidad internacional: Revisar aspectos técnicos para alinear los resultados con evaluaciones globales.

Hacia una política educativa basada en datos

El informe destaca que, aunque las pruebas Aprender han logrado avances significativos, el escaso progreso en calidad y equidad educativa refleja una tarea pendiente. La mejora en estas evaluaciones y su aplicación efectiva son esenciales para garantizar que todos los estudiantes en Argentina puedan acceder a una educación de calidad.