
Colapinto, quien compite en la Fórmula 2 y ha mostrado un desempeño destacado en categorías inferiores, es considerado uno de los principales motores detrás de esta revitalización.
La última vez que la Fórmula 1 visitó Argentina fue en 1998, pero la falta de infraestructura y el alto costo de organizar un Gran Premio han sido barreras difíciles de superar. Sin embargo, el éxito de pilotos jóvenes como Colapinto ha reavivado el entusiasmo tanto del público como de potenciales inversores. Diversas gestiones han estado en marcha para asegurar el regreso del Gran Premio a Argentina, con el respaldo del sector privado y la expectativa de una nueva generación de fanáticos y patrocinadores.
Este interés ha sido impulsado por el impacto mediático de Colapinto, quien ha capturado la atención de aficionados y patrocinadores a nivel global. Argentina tiene una rica historia en la Fórmula 1, con Juan Manuel Fangio como uno de los grandes íconos de este deporte, y el regreso de un Gran Premio sería un homenaje a ese legado.