Estudiantes de la UNPA toman la sede de Caleta Olivia por 48 horas en protesta contra el veto al financiamiento universitario

La ocupación del edificio fue decidida tras una vigilia realizada en la tarde del lunes en la cantina de la institución, durante la cual los estudiantes manifestaron su preocupación por el impacto del veto presidencial en su educación.

Como parte de la protesta, los estudiantes de la Licenciatura en Comunicación Audiovisual transmitieron en vivo el evento a través de su canal de YouTube, buscando visibilizar su situación y compartir sus reclamos con la comunidad.

José Luis Garrido, persona non grata en la Universidad Nacional de la Patagonia Austral

Además, los estudiantes declararon "persona non grata" al diputado José Luis Garrido, del partido SER, quien votó a favor del veto presidencial. En un comunicado, señalaron que el voto de Garrido “no solo atenta contra las universidades públicas en Argentina, sino que también daña a los estudiantes de la provincia de Santa Cruz, quienes dependen de estas instituciones para su formación”.

Durante la vigilia, los estudiantes leyeron una carta abierta dirigida a la comunidad de Caleta Olivia y la provincia de Santa Cruz. En el documento, expresaron su preocupación por la posible discontinuidad de su carrera ante el recorte de financiamiento y denunciaron que, debido a la falta de cobertura docente, el próximo ciclo lectivo podría no contar con ingreso para el primer año de la licenciatura.

La carta describe cómo la medida impacta profundamente en la vida de los estudiantes, quienes enfrentan incertidumbre sobre su futuro académico y profesional. “Nos quieren dejar sin oportunidades de crecimiento y desarrollo. Quienes se oponen a la educación pública, gratuita y de calidad, buscan empobrecer nuestro futuro”, expresaron.

Este descontento también fue compartido por docentes y graduados de la carrera, quienes firmaron un texto de apoyo al reclamo estudiantil, manifestando su solidaridad y preocupación ante el posible recorte de recursos que afecta no solo a la educación sino también a la cultura y el desarrollo audiovisual de la región.

En el contexto de esta ocupación, los estudiantes de la UNPA continúan pidiendo el apoyo de la comunidad y exigen que las autoridades nacionales reconsideren la decisión, defendiendo la educación pública como un derecho fundamental que no puede estar supeditado a recortes presupuestarios.

La situación genera tensiones en la región, donde otros sectores han comenzado a expresar su apoyo a la protesta. La UNPA, una de las instituciones más significativas en el ámbito educativo en Santa Cruz, podría enfrentar serios desafíos en los próximos meses, a medida que el conflicto por el financiamiento universitario se intensifica.