Este lema generó un fuerte impacto tanto en las calles como en las redes sociales, donde miles de usuarios comenzaron a compartir imágenes y a debatir sobre el significado de esta frase.
La frase ha llevado a muchos a reflexionar sobre el estado actual de la educación. En un mundo donde la información está a solo un clic de distancia y lo inmediato parece dominar nuestras vidas, optar por una educación profunda y sistemática puede ser visto como un desafío a la superficialidad. Elegir el estudio, leer un libro o profundizar en temas específicos contrasta con la tendencia hacia la gratificación instantánea, convirtiendo a la educación en una forma de resistencia cultural.
El impacto del mensaje trascendió las calles. En plataformas como X (anteriormente Twitter) e Instagram, los usuarios comenzaron a compartir fotografías de los afiches y a discutir sobre su significado. Uno de los casos más destacados fue el del comediante y youtuber Pablo Agustín, quien publicó una imagen de uno de estos carteles junto a un comentario que vinculaba el mensaje con su deseo de estudiar psicología. Esta publicación rápidamente generó miles de interacciones, y muchos seguidores lo alentaron a seguir su vocación.
Muchos de los comentarios en redes sociales coinciden en que la frase de los afiches refleja una crítica a la velocidad y superficialidad de la sociedad actual. Mientras la información rápida y el consumo inmediato ganan terreno, dedicar tiempo al estudio y a la reflexión se percibe como una forma de romper con la corriente dominante. Esto pone sobre la mesa un debate importante: ¿está la educación tradicional perdiendo relevancia frente al acceso inmediato a la información?
Pese a la repercusión mediática y digital, el origen de estos carteles sigue siendo un enigma. Las teorías sobre la autoría varían: desde movimientos sociales hasta campañas educativas, pero no hay confirmaciones. Lo que es cierto es que esta acción ha logrado generar un amplio debate sobre el valor del conocimiento profundo en tiempos donde lo efímero parece reinar.