El 76% de los especialistas en recursos humanos cree que el contenido que los empleados publican en sus redes puede afectar su posición dentro de una organización. Además, el 65% considera que estas publicaciones impactan la cultura y la imagen corporativa, resaltando la importancia de gestionar cuidadosamente la presencia en línea.
El estudio revela que el 33% de los especialistas en recursos humanos tomaría medidas si una publicación de un empleado afecta la imagen de la organización. Las consecuencias pueden variar desde una conversación informal hasta la rescisión del contrato, dependiendo de la gravedad del caso. Sin embargo, el 29% de los especialistas no actuaría al respecto, mientras que el 24% aconsejaría al empleado sobre el uso responsable de sus redes, aclarando que son de su propiedad.
Para evitar problemas relacionados con las redes sociales, el 31% de las empresas establece acuerdos de confidencialidad y cláusulas de protección de datos en los contratos laborales. Además, el 16% educa a sus empleados sobre la importancia de proteger su privacidad en línea, brindándoles orientación sobre la configuración adecuada de sus perfiles. En menor medida, el 24% de las organizaciones prohíbe ciertas prácticas en las redes sociales personales, y un 10% directamente prohíbe comentarios relacionados con la organización.
El 60% de los empleados en Argentina controla lo que publica en sus redes sociales por miedo a repercusiones negativas en su carrera. Sin embargo, el 40% ha experimentado o presenciado casos donde las publicaciones en redes sociales afectaron negativamente la carrera de alguien. Los problemas más comunes incluyen la exposición de conductas inapropiadas fuera del horario laboral (28%), comentarios negativos sobre colegas o superiores (23%), y participación en discusiones políticas o religiosas que generaron conflictos (17%).