Durante una conferencia de prensa en Nueva York, Paul propuso modificar las reglas, sugiriendo diez asaltos de tres minutos en lugar de los ocho asaltos de dos minutos programados. Tyson, de 58 años, rechazó la propuesta con firmeza. El evento será transmitido en exclusiva por Netflix y se espera que sea uno de los más grandes del año. Tyson, cuya última pelea profesional fue en 2005, enfrentará a Paul, 31 años menor y con un récord de 9-1 en el boxeo profesional.
Conflictos sobre las reglas y las finanzas
La discusión sobre la duración de los asaltos no fue el único tema polémico. Surgieron rumores de que Tyson podría enfrentar restricciones contractuales que afectarían sus ganancias si logra un knockout rápido. Según Carl Froch, Tyson ganaría menos dinero si derrota a Paul en los primeros asaltos, lo que añade una capa de intriga al enfrentamiento. Por su parte, Paul no se muestra preocupado por las cláusulas contractuales y afirmó que su objetivo es claro: noquear a la leyenda del boxeo y llevarse 40 millones de dólares.
Tyson, quien no ha peleado profesionalmente desde su derrota ante Kevin McBride en 2005, regresa al ring tras su exhibición contra Roy Jones Jr. en 2020, donde recaudó 80 millones de dólares. A pesar de haber experimentado problemas de salud recientemente, Iron Mike está listo para enfrentar a Paul en un combate que promete ser histórico. Este enfrentamiento no solo es un choque de generaciones, sino también una prueba de resistencia y habilidad, donde ambos boxeadores buscarán consolidar su legado en la historia del deporte.