En una entrevista del Móvil de La Vanguardia Radio con José Villareal, representante de los empleados municipales, se evidencian las crecientes tensiones entre el sindicato y la administración local. La espera de respuestas se ha prolongado, generando malestar y movilizaciones en el ámbito laboral.
Villareal destaca la importancia de la respuesta del Ejecutivo, mencionando un petitorio entregado días atrás al Secretario coordinador del municipio. La falta de acción y respuestas concretas ha llevado a que los empleados consideren medidas más enérgicas. La preocupación se refleja en la ausencia del Intendente, quien lleva días sin aparecer en la sede municipal.
La petición principal gira en torno al cumplimiento del Acta de Acuerdo, específicamente el pago del bono acordado en la ordenanza 6630. El dirigente gremial acusa al secretario general de entorpecer las negociaciones y dilatar el proceso, generando malestar entre los trabajadores. La falta de transparencia en las cifras y la reticencia a proporcionar información sobre el supuesto voto o porcentaje del Intendente aumentan la incertidumbre.
En cuanto a las posibles medidas a tomar, Villareal menciona la posibilidad de una retención de servicio, pero destaca la importancia de comenzar de manera gradual. Señala que la responsabilidad del gremio radica en movilizarse ante el incumplimiento del municipio, según lo establecido en el punto 11 del acta.
Las discrepancias entre los empleados se incrementan y algunos no respaldan las acciones tomadas hasta ahora. Villareal argumenta que históricamente, las decisiones se toman democráticamente, aunque reconoce que no todos los empleados están dispuestos a respaldar las medidas adoptadas.
La jornada actual incluirá un micrófono abierto para que los trabajadores expresen sus opiniones y preocupaciones. Se espera que esta modalidad permita la participación activa de los empleados y destaca la presencia de jubilados municipales, quienes también se ven afectados por la situación.
La incertidumbre sobre el futuro de las negociaciones y las posibles medidas de fuerza generan preocupación entre los ciudadanos, ya que cualquier acción tomada afectará directamente la prestación de servicios municipales. El diálogo entre ambas partes parece desgastado, y la comunidad espera una pronta resolución ante el inminente cambio de gobierno.