Un joven de 19 años de edad, que había sido aprehendido tras un llamado a la comisaria Quinta.
Fue alojado en un calabozo de la comisaria ubicada en el B° Rotary 23, se quitó la vida.
El hecho, que todavía no fue confirmado por autoridades policiales, tiene como protagonista Rodrigo Curaqueo quien apareció sin vida en una celda, ahorcado con su propia ropa, colgándose de un barrote.
De acuerdo a información extraoficial, el joven fue denunciado por su propia madre, ya que lo habría agredido físicamente y también sufrió la misma suerte su padrastro.
El joven fue detenido en la mañana del miércoles y por la tarde se quitó la vida. Fue descubierto por efectivos de Comisaria Quinta cuando realizaban un control de los detenidos.
Por la noche cuando los amigos y conocidos del muchacho se enteraron que falleció Curaqueo, fueron a hacer justicia en la comisaria tirando piedras, donde fue herido de gravedad un efectivo de Comando Radiolectrico.
Mientras tanto el Juez Perez Soruco investiga lo sucedido y la causa de la muerte del joven de esa populosa barriada.
En las primeras horas del jueves la policía se encontraba apostada en inmediaciones de la Comisaria para preservar daños al edificio.