Las mismas iban en encomiendas que llevaba un transporte de pasajeros desde Tinogasta, provincia de Catamarca hacia Caleta Olivia.
La detección se realizó durante una inspección de rutina sobre el equipaje de dicho transporte. Las uvas no contaban con el tratamiento cuarentenario necesario para ingresar a la región así como tampoco poseían la documentación sanitaria.
En este caso, la mercadería se decomisó y destruyó para proteger la sanidad vegetal de la región.
Con este tipo de acciones, el Senasa protege la salud de los consumidores, resguarda a los productores responsables y salvaguarda la sanidad animal y vegetal de la región patagónica.