
Los copagos son pagos adicionales que el afiliado realiza cada vez que utiliza un servicio médico. Si bien forman parte de algunos planes más económicos —los llamados “low cost”—, su aplicación está regulada y, en ciertos casos, completamente prohibida.
“Hay determinadas prestaciones médicas para las cuales está prohibido por ley pedir copago. No corresponde cobrar absolutamente nada. Eso el usuario tiene que saberlo para no pagar de más y poder reclamar su reintegro”, subraya Granillo Fernández.
La normativa vigente prohíbe aplicar copagos en las siguientes situaciones:
Tratamientos oncológicos
Prestaciones por discapacidad
Atención médica por VIH/SIDA
Emergencias calificadas como “código rojo” en guardias médicas
Si sos afiliado a una prepaga y te cobraron un copago por alguna de estas prestaciones, tenés derecho a exigir el reintegro completo del dinero, incluso si ya pagaste para poder atenderte.
“Mucha gente no reclama porque el médico no da factura o el trámite parece engorroso. Pero si se pide la factura y se presenta el reclamo, el reintegro es viable. Es dinero que no corresponde pagar y que el sistema está obligado a devolverte”, aclara la abogada.
Pedí siempre factura: Aunque el médico diga que no emite, insistí. Es tu derecho y la única forma de reclamar legalmente.
Revisá qué plan tenés: Muchas veces el desconocimiento del tipo de cobertura genera confusión. La prepaga está obligada a informarte con claridad qué incluye tu plan y cuánto cuesta cada copago.
Reclamá el reintegro: Si te cobraron por error o de forma ilegal, la prepaga debe devolverte el dinero. Presentá el comprobante y el reclamo formal ante la entidad.
Además, desde enero de este año, una resolución de la Superintendencia de Servicios de Salud derivó automáticamente a muchos usuarios desde las obras sociales sindicales hacia las entidades de medicina prepaga, si habían contratado un plan “superador”. Esto puede haber modificado silenciosamente el tipo de cobertura, y también los copagos, sin notificación clara.
Podés consultar si tu prestación está alcanzada por la prohibición de copagos en el sitio web de la Superintendencia de Servicios de Salud. También podés asesorarte con abogados especializados en defensa del consumidor.