
La conversación tuvo lugar horas antes de que la Legislatura de Santa Cruz debatiera el proyecto de ley 067/25, que declara de interés provincial la reactivación del astillero y busca dar respaldo institucional para avanzar con su finalización.
“Sigue siendo un proyecto estratégico para Santa Cruz. No solo por lo que representa en términos de soberanía, sino por el volumen de flota que opera en la región y que necesita reparaciones”, señaló Tettamanti a La Vanguardia Noticias.
El astillero de Caleta Paula, proyectado hace más de una década fue concebido con una infraestructura de gran escala, incluyendo un Syncrolift que, según Tettamanti, está entre los cinco más grandes del mundo.
Sin embargo, la obra se detuvo con apenas un 35% de avance certificado, principalmente por la falta de energía eléctrica suficiente para operar. Ese fue el “cuello de botella histórico” que impidió segmentar el desarrollo por etapas.
“El problema no fue técnico ni de mercado. Fue político. Hubo un momento donde no se pudo ni adecuar ni seguir. Ahora hay una oportunidad concreta si se ordena el expediente y se establece un marco contractual razonable”, afirmó.
Tettamanti confirmó que la empresa concesionaria original mantiene la voluntad de inversión: “Ya hicimos un esfuerzo financiero enorme. Seguimos trabajando incluso durante el parate, apoyando con reparaciones en escuelas. Estamos listos para aportar lo necesario si se generan las condiciones legales y contractuales”.
La nueva estrategia sería completar rápidamente el 50% de la obra, utilizando la energía eléctrica hoy disponible y proyectando el avance por etapas según la realidad financiera y energética.
“La ley le da al Gobernador herramientas para avanzar. No conozco la letra chica, pero se intuye que podrá adecuar compromisos o condonar deudas acumuladas por los cambios económicos. Y eso es central si queremos salir del pantano”, sostuvo el empresario.
Tettamanti también subrayó que, por las dimensiones del Syncrolift, el astillero necesitará ampliar su clientela más allá de la flota argentina.
En la defensa del proyecto de Ley que presentó el diputado Pedro Luxen y en la que habló el ex ministro de Producción, Gustavo Martínez, en una reunión de comisión se mencionó una cifra de 520 barcos operando cerca de Santa Cruz. Es decir que existe la clientela posible.
Consultado sobre los recientes cambios en la normativa de cabotaje nacional, que habilitan el ingreso de buques extranjeros, Tettamanti fue crítico pero pragmático: “Aunque no lo compartamos, puede convertirse en una oportunidad si el astillero está operativo. Esos barcos también necesitarán reparaciones”.
Respecto a la reactivación del astillero en Comodoro Rivadavia, que podría verse como competencia directa, Tettamanti descartó cualquier riesgo para Caleta Paula: “Son incomparables. El de Comodoro no tiene más del 10% de nuestra capacidad. En vez de ver competencia, hay que ver un polo de servicios navales en el Golfo San Jorge. Podemos complementarnos y ser una alternativa para el mundo”.
Es el propio Gobierno de Santa Cruz el interesado en la reactivación de este proyecto, porque como dijo el ex ministro de Producción, Martínez, se estima que "podrían generarse al menos 250 empleos directos, sin contar los indirectos" que movilizaría la cadena logística, de mantenimiento, y formación técnica.
“Este proyecto lleva casi veinte años esperando. Es hora de dejar atrás los obstáculos históricos. La infraestructura está. Solo falta voluntad política y un marco que nos permita terminarlo”, cerró Tettamanti.
Por Marcelo del Valle Romero para La Vanguardia Noticias