
El caso de Julia Casas, la mujer de 77 años que fue atropellada y asesinada por un conductor con 2,35 gramos de alcohol en sangre, volvió a encender la bronca y la frustración en Caleta Olivia. A días de iniciarse el juicio por su muerte, la familia se enteró sorpresivamente que el proceso fue suspendido hasta septiembre sin ninguna notificación formal.
El hecho ocurrió el 24 de junio de 2023, cuando Julia salía del hospital y fue embestida por un vehículo a alta velocidad. El nivel de alcohol que presentaba el conductor, más de cuatro veces el límite permitido, convirtió el caso en un símbolo de la lucha contra los siniestros viales en la ciudad y la provincia.
Este lunes, Claudio y Teresa, hijos de Julia, hablaron en Radio Vanguardia y manifestaron su indignación por la manera en que fueron informados. “Estuvimos en contacto con la fiscalía, incluso días antes del juicio. Nos habían citado a hablar con el fiscal antes de la audiencia, pero nunca nos dijeron que se iba a suspender”, denunciaron. “Nos preparamos como familia, movilizamos a todos, y de repente nos enteramos por otros canales que el juicio no se hacía. Nadie nos dio explicaciones”.
La familia no oculta su temor ante las postergaciones. Aunque aseguran que no creen que la causa prescriba, sí sienten que se dilata indefinidamente. “Te preparás emocionalmente, preparás a tus hijos, y después tenés que retraer todo. Es muy doloroso y desgastante”, expresaron.
El caso de Julia también se transformó en otra bandera de reclamo para que el Senado de la Nación avance con la modificación del Código Penal en materia de delitos viales. La familia impulsa una campaña para que los tres senadores por Santa Cruz—Alicia Kirchner, José María Carambia y Natalia Gadano—apoyen el proyecto que agrava las penas cuando los siniestros son cometidos bajo los efectos del alcohol.
“La iniciativa contempla penas de hasta 15 años y nuevas figuras agravantes. Ya tiene dictamen favorable en comisión, y ahora esperamos que los senadores santacruceños voten a favor”, explicó Claudio. La senadora Gadano ya votó positivamente en comisión, y la familia espera que mantenga su postura en el recinto.
El conductor que atropelló a Julia sigue en libertad. La causa está caratulada como “homicidio culposo”, una figura que, según el Código Penal actual, permite condenas de cumplimiento condicional o incluso suspensión de juicio a prueba.
“No queremos que termine en tareas comunitarias o una pena menor a tres años. Queremos que haya una condena real, ejemplificadora, porque si no se pone un límite, esto va a seguir pasando”, reclamaron. Recordaron, además, el reciente caso de Briana Matulich en Río Gallegos, en el que el responsable fue condenado a 12 años de prisión e indemnizó con 100 millones de pesos a la familia.
Vecinos del barrio General Paz también alzaron su voz. La calle Eva Perón, donde ocurrió el hecho, sigue siendo “una pista de carreras”, según relataron.
A pesar de los reclamos, no se instalaron reductores de velocidad ni aumentó el control policial en la zona.
Mientras tanto, la familia prepara una nueva acción simbólica: colocar una Estrella Amarilla en el lugar del hecho, para mantener viva la memoria de Julia y recordar que su muerte fue evitable.
“Ella era el eje de nuestra familia, estaba en todos los detalles, organizando, ayudando. La extrañamos cada día. Ya van a ser dos años y todavía no tenemos justicia”, expresó Teresa.