
Desde el Ministerio de Seguridad de la provincia de Santa Cruz se llevó a cabo una planificación minuciosa que incluyó la participación de la Policía Provincial, Bomberos, Protección Civil y la Agencia Provincial de Seguridad Vial. El operativo, que fue supervisado directamente por el ministro de Seguridad, Pedro Prodromos, contó además con el respaldo del Ministerio de Trabajo y la Subsecretaría de Transporte.
Uno de los ejes principales del dispositivo fueron los controles vehiculares, con un total de más de 15 mil test de alcoholemia realizados a lo largo del fin de semana. Como resultado, se registraron 40 infracciones y más de 20 vehículos fueron secuestrados por incumplimientos a las normativas viales.
Durante el festival, el personal de Bomberos y Protección Civil estuvo desplegado estratégicamente dentro del anfiteatro, asegurando una rápida respuesta ante cualquier emergencia. En total, se asistió a 28 personas que sufrieron descompensaciones menores, todas trasladadas al puesto sanitario sin que se reportaran situaciones de gravedad.
La desconcentración del evento se desarrolló en un marco de orden y bajo estricta supervisión policial en las principales avenidas y accesos a la ciudad. Asimismo, el operativo de seguridad se extendió hasta el día lunes, con el objetivo de garantizar la salida segura de los asistentes y prevenir incidentes en las rutas.