
Aunque las ventas aumentaron por las Fiestas, no lograron compensar las fuertes caídas previas. La comparación se realiza sobre diciembre de 2023, marcado por la devaluación y una inflación del 25,5%, lo que moderó la magnitud de la retracción.
Los supermercados de cadena mostraron una baja del 17,3% a nivel nacional y 16,3% en el AMBA durante diciembre. En el acumulado anual, la caída fue del 14,5% y 13,5%, respectivamente. El interior del país sufrió un derrumbe del 18,1% interanual y 15,4% anual. En los autoservicios independientes, la baja fue de 18,7% en diciembre y 13,4% en el año.
Las categorías con mayores caídas en diciembre fueron:
Bebidas sin alcohol: -24,4%
Bebidas con alcohol: -22,7%
Higiene y cosmética: -21%
Limpieza de ropa y hogar: -20,7%
Productos impulsivos: -18,6%
Desayuno y merienda: -16,1%
Alimentos: -13,3%
Perecederos: -7,7%
En el año, destacaron las caídas en bebidas alcohólicas (-19,6%), bebidas sin alcohol (-18,3%) e higiene y cosmética (-17%).
Pese a la desaceleración inflacionaria, con un índice del 2,7% en diciembre y un aumento del 2,2% en alimentos y bebidas no alcohólicas, el consumo no logró repuntar. Los incrementos en carnes, pan y lácteos influyeron en esta situación.
A diferencia del consumo masivo, las ventas minoristas de pymes crecieron 17,7% en diciembre, aunque cerraron el año con una baja del 10%, según la CAME. El crecimiento mensual fue impulsado por la extensión del clima navideño y facilidades de financiamiento.
Osvaldo del Río, director de Scentia, proyectó que, si bien no se espera un crecimiento significativo, el consumo podría mostrar una leve mejora del 3% en 2025 gracias a la recuperación salarial y la inflación controlada.