
Pamela González comentó en la oportunidad que como equipo de trabajo asumieron la responsabilidad hace 60 días. El 1° de agosto se inició el proceso de puesta en valor de la base operativa de Cañadón Seco de la Fundación Santa Cruz Sustentable, una base que había quedado hace más de 10 años abandonada. Más allá de que el personal prestaba servicios en otros espacios.
A mediados de agosto se inició el proceso de volver físicamente a la planta en Cañadón Seco, lo que comenzó por una limpieza y el reacondicionamiento del lugar.
“Teníamos techo y paredes. Pusimos nuevamente ventanas, aberturas, sanitarios. Iniciamos el proceso de restitución de todos los elementos que faltaban, calefactores, tanques de agua. Se hicieron los trabajos eléctricos y de gas para poder volver a estar operativamente en la planta. Eso era una de nuestras estructuras de trabajo”, comentó Pamela y destacó que lo más desafiante era poder volver a producir adoquines.
Junto a un grupo de profesionales, la primera semana de septiembre se conoció que la máquina que no funcionaba desde 2015 iba a ser operativa.
“Hay un trabajo bastante grande en estos 60 días hasta que logramos iniciar una producción”, dijo la secretaria socioeconómica y mencionó que hoy hay un stock.
González aclaró que hoy no se está en condiciones de comercializar, ya que aún se encuentran en un proceso de auditoría interna, junto a un equipo contable, rehaciendo los balances.
“Desde el 2015 no se estaban presentando los balances, por ende, eso es uno de los requisitos para poder participar de cualquier tipo de venta, poder desbloquear el cuit comercial y de esa manera comenzar a operar, así que ese proceso estaría un poquito demorado”.
Personal capacitado
Por otro lado, Francisca Gil habló sobre su área que tiene que ver con capacitaciones para el personal. “Una de las demandas de la Secretaría era capacitar al personal, y en eso hemos trabajado y prontamente saldrán las capacitaciones en lo que es el armado de adoquines”, indicó y destacó que los formadores vendrán de la empresa Petroquímica de Comodoro Rivadavia.
El objetivo es que el personal que trabaje en la planta, tenga las capacidades y las habilidades de saber cuánto, qué grado de humedad va a tener el adoquín, dependiendo la arena, el cemento, las medidas horizontales, verticales, de las columnas, la colocación. Esta capacitación tendrá una parte práctica y teórica, dijo la supervisora de políticas laborales.
En otro tramo de la entrevista, la secretaria socioeconómica, Pamela González recordó que hoy la estructura que hay de costos para la producción es muy alta, y se viene solventando desde el municipio. Se comenzó a trabajar con materiales provistos por el municipio. “Entonces hoy la intención es que estos adoquines que son los primeros que vamos a instalar, que se vuelva a recapacitar al personal para lo que es la colocación, también capacitar al personal municipal”, dijo.
En cuanto al personal de Fundación Santa Cruz Sustentable, González indicó que se realizó un trabajo bastante profundo. “Había casos en los que no estaban prestando servicio, había otros que el personal estaba prestando funciones en otros lugares, teníamos algunas personas que estaban destinadas a alguna actividad específica como lo que era mantenimiento de escuela, pintura en establecimientos educativos, cambio de luminarias en los colegios, que hemos requerido que vuelvan a la Fundación”, explicó y agregó que “Hoy tenemos el personal dividido en dos sectores, uno es la planta de Cañadón y la otra es en la planta de procesamiento de Petrumco, así que tenemos dos focos productivos y de trabajo”.
Son aproximadamente entre 20 y 25 personas por turno para la labor en la planta de adoquines.