
Este jueves, se inaugurará oficialmente la nueva sede libertaria, un evento encabezado por Martín Menem, titular de la Cámara baja.
Durante casi cuatro décadas, este espacio fue el centro neurálgico de la militancia kirchnerista. Aquí se festejaron victorias electorales y se coordinaron estrategias para comicios locales y nacionales. Sin embargo, el declive del movimiento kirchnerista en la provincia llevó a que el local quedara prácticamente desocupado en los últimos años.
La llegada de LLA al histórico local no fue casual. Detrás de la negociación estuvo Jairo Henoch Guzmán, referente libertario en la provincia y directivo del PAMI en Santa Cruz. La apertura de esta nueva sede es vista por el mileísmo como un hito clave para su expansión en la región patagónica, marcando el inicio de lo que consideran una nueva era política en Santa Cruz.
La ocupación de este espacio por parte de La Libertad Avanza no solo simboliza un cambio de inquilinos, sino también un fuerte mensaje político: el declive del kirchnerismo y el auge del movimiento libertario. Según fuentes del partido, este movimiento refleja cómo el kirchnerismo, además de perder fuerza electoral, también cede sus espacios más emblemáticos.
El equipo de operarios encargado de la renovación encontró numerosos folletos y propaganda de antiguas campañas kirchneristas, que rápidamente fueron descartados para dar paso a la nueva estética libertaria. La imagen del presidente Javier Milei y de su hermana Karina, junto con referentes locales, ahora adorna las paredes del que fuera un bastión kirchnerista.
Este evento marca solo el comienzo. Según fuentes locales, la inauguración de esta sede es la primera de muchas que se esperan en la provincia. El objetivo de LLA es claro: inundar Santa Cruz con la ideología libertaria, consolidándose como una fuerza política dominante de cara a las próximas elecciones.
La elección de Javier Milei como presidente ha sido el impulso que LLA necesitaba para expandirse en territorios tradicionalmente dominados por el kirchnerismo. La toma de este local es vista como un símbolo de esa transformación política que está ocurriendo en el país.