
En un acto de horror, Silva asesinó a sus hijos, un niño de 2 años y una niña de 7, disparándoles con su arma reglamentaria. Antes de huir, dejó carteles en la casa dirigidos a su hermana, advirtiendo que no entrara y pidiera ayuda.
La fiscal María del Valle Durán informó que los niños fueron asesinados con disparos en la cabeza y el tórax. Silva les colocó almohadas en la cabeza antes de ejecutarles. Posteriormente, escribió dos carteles, uno en el frente y otro en la parte trasera de su vivienda, ambos dirigidos a su hermana Melina, que vivía en la misma propiedad, para evitar que entrara y viera la macabra escena.
Tras cometer el doble crimen, Silva intentó escapar. Fue localizada por la policía dos horas después cerca del Dique Cruz de Piedra. En el operativo, se recuperó su arma reglamentaria y fue detenida.
El móvil del crimen, según la investigación, sería una profunda crisis económica. Silva tenía deudas que ascendían a casi 7 millones de pesos, obtenidos a través de préstamos y tarjetas de crédito. Los investigadores creen que, tras asesinar a sus hijos, tenía la intención de suicidarse, pero no pudo llevarlo a cabo.
El abuelo de los niños confirmó la difícil situación económica de Silva, quien dejó una nota mencionando sus deudas en un cuaderno de su hija de 7 años. Mientras tanto, la familia, sumida en el dolor, busca entender qué llevó a la oficial a cometer este atroz acto.
Silva será indagada próximamente, y la fiscalía sigue trabajando en la reconstrucción del hecho y en los peritajes necesarios para esclarecer lo ocurrido.