En una entrevista con Radio Vanguardia, César Gribaudo, experto en el estudio y avistaje de ballenas en la costa patagónica, reveló un dato alentador: "Están recuperando una población que prácticamente la han llevado hasta la extinción." Estas afirmaciones se basan en años de observación y estudios realizados desde 1998, cuando se comenzó a registrar el comportamiento de las ballenas en la zona.
Gribaudo relató cómo se ha visto una creciente presencia de diversas especies en la región, incluyendo la ballena sei, la azul, la fin y la franca. Destacó que "lo que estábamos empezando a ver hace casi 30 años, y que confirmamos hace un poco menos de 20 años, se estaba cumpliendo. Y que era la misma situación que teníamos hace casi 100 años."
Este resurgimiento de las ballenas ha abierto una oportunidad turística significativa para la región. Gribaudo afirmó que esta es "la única población costera de ballenas Sei que hay en el mundo que está frente a una ciudad y que hoy la podemos ver." Sin embargo, el experto hizo hincapié en la necesidad de regular y educar sobre el avistaje, para evitar interferir con los hábitos naturales de los cetáceos.
Señaló la importancia de establecer lineamientos para el avistaje y la interacción con las ballenas: "Se estudian los comportamientos frente a las embarcaciones que están constantemente acá, y cómo reaccionan".
Gribaudo también mencionó que están trabajando en un proyecto de ley que ya se encuentra en la Cámara de Diputados, con el objetivo de reglamentar cómo debe realizarse el avistaje y qué actividades no se deben hacer, tanto para quienes se dedican al avistaje como para cualquier embarcación que se acerque a las ballenas.
Una de las preocupaciones principales es evitar incidentes como los que a veces se observan en internet, donde personas en kayak se acercan demasiado a las zonas de alimentación de las ballenas. "No se pueden hacer esas cosas que a veces vemos en YouTube, que se meten con el kayak en el lugar donde se están alimentando", advirtió Gribaudo, recordando incidentes donde las ballenas han tomado por accidente a las personas con el kayak y las han expulsado luego.
La conservación y el turismo van de la mano en este esfuerzo, y Gribaudo enfatizó que es crucial educar a la comunidad sobre el comportamiento de estos animales para fomentar su conservación y el aprovechamiento turístico sostenible. "La gente entienda cada vez más de este comportamiento, de por qué están acá, de cuáles son, para que aprendamos a cuidarla y podamos aprovecharla como ciudad, como una ciudad turística, con un recurso turístico."