En una entrevista en Radio Vanguardia que el salario actual no cubre la canasta básica.
"El intendente dice que los trabajadores no necesitan un aumento del 75%", en referencia a un recorte de sus declaraciones sobre el reciente reclamo del SOEMCO de incremento salarial.
Curallán, autor de otro proyecto de Comunicación de un aumento salarial del 70%, argumentó que la falta de comunicación y responsabilidad del Ejecutivo municipal ha exacerbado la situación. "Falta responsabilidad porque no se están respetando las partes", manifestó, quien también criticó la falta de transparencia en la gestión de los fondos públicos.
El intendente supera los $2.300.000 de salario, mientras que los empleados municipales ganan alrededor de $370.000 (categoría más baja), creando una brecha salarial significativa. "La canasta básica y el costo de vida para los caletenses superan $1 millón", resaltando cómo esta diferencia ha llevado a una situación económica precaria para los empleados municipales.
Curallán expresó su preocupación por las promesas incumplidas y la contradicción en las declaraciones oficiales. "El secretario de gobierno (Juan Ignacio Acuña Kunz) dijo la verdad, hay superávit en el Municipio, porque hay un margen sobrante de 1.000 millones o más de pesos y que estamos en emergencia económica es una mentira", comentó.
La propuesta de un aumento del 70% busca aliviar esta situación. El concejal insiste en que este incremento beneficiaría a los empleados municipales y tendría un impacto positivo en la economía local. "Hoy hay descontento en la sociedad, incluso entre los que no son municipales, porque tienen vecinos que la pasan mal", añadió.
El concejal pidió empatía y una discusión seria sobre la situación salarial. Afirmó que el ajuste en los salarios políticos es necesario para mayor equidad. "Invitaría al intendente a que pueda él gozar durante los meses que vienen padeciendo los empleados municipales con un salario de $370.000", retó Curallán.
“Parece que estamos viviendo una pandemia, en la pandemia del intendente, en la cual no se conocen los números, en la cual hay que ajustarse a todo, en la cual hay una preocupación, una incertidumbre, un miedo”, criticó.
También se planteó que los cargos políticos cobran siete veces más que un empleado de planta permanente de la categoría más baja, lo que incurriría en incumplimiento de la legislación vigente.
“Cuando se generó el aumento del 25 %, yo presenté un proyecto que fue aprobado para que no le signifique este 25 % a la planta política, con anterioridad. Pero no hicieron caso al pedido que le hemos hecho de manera prolija y en donde se sesionó en el Honorable Consejo Deliberante. Ahora, esto no es en contra de la planta política, que también son trabajadores y que también merecen tener un incremento, sino más bien para fijar empatía, para fijar sentido común ante la problemática”, argumentó.
“Hoy hay descontento en la sociedad, incluso entre los que no son municipales porque tienen un vecino que la pasa mal. Antes, el empleado o el dinero de la planta municipal generaba otro empleo, como el que tenía una niñera, contrataba a alguien para limpiar el patio, o tenía a su hijo estudiando en Comodoro Rivadavia, Córdoba”.
“Vivimos una emergencia económica donde la proporción de la planta política supera lo manifestado en una sesión, de poner a toda una sociedad, porque no están poniendo a los municipales y al ámbito político una emergencia económica, sino a toda una sociedad en una emergencia económica que no existe”, dijo. “Entonces el vecino escucha que vivimos una emergencia económica y hay más de 200 personas nombradas como funcionarias, y entonces ¿por qué hay emergencia económica?”.
Radio Vanguardia -¿No cree que sería hora de volver a una proporción de tres a uno, para que el cargo político no sea una conveniencia económica? Así, el funcionario o funcionaria se enfocaría más en su trabajo por vocación que por negocio.
Curallán -Sí, claro. Sería más justo y habría más transparencia. Ahora sí o sí, quien tiene que cambiar su postura y pensamiento cerrado es el intendente. Él tiene que empezar a actuar de otra forma, empezar a mirar a los ojos a los vecinos de Caleta Olivia y contarles por qué es intendente, creo que todavía no lo ha manifestado.
Radio Vanguardia -Curallán: ¿qué imagen tiene del Pablo Carrizo de hoy, al que asumió en diciembre?
Curallán -Ninguna, porque no interpreto cuál es su mirada positiva para nuestros vecinos de Caleta Olivia, qué es lo que quiere para los trabajadores, qué quiere para una mejor Caleta Olivia? No, la verdad que ninguna.