“El intendente no habla con sus colaboradores más directos” dicen desde el propio gabinete municipal. La semana pasada presentó la renuncia alguien que generaba rispideces dentro del equipo de gobierno. Un colaborador de SER y muy cercano a Claudio Vidal dejó el gabinete luego de una compulsa interna con el jefe de Gabinete Luis Melo.
Quizás uno de los puntos débiles que transita el gobierno municipal desde su comienzo sea la gestión política, sin contar las posiciones sobre cada temática en las que el municipio muchas veces queda carente de opinión y sin una mirada general, tanto en lo político como así también en lo económico.
El subsecretario renunciado quiso ejercer ese rol, pero la palabra “política” no es bienvenida en la intimidad de la gestión. Por eso los bandos dentro del gabinete se diferencian en ese concepto, los que “vinieron a hacer política” y “los que vinieron a trabajar.”
Los bandos no deberían diferenciarse, sino que tendrían que contar de las dos cualidades, pero sólo se escuchan críticas hacia el modo de entender la política el Jefe de Gabinete, quién se ha encargado de ampliar su poder de decisión sobre las áreas municipales “sin una brújula que muestre hacia donde vamos”, afirman integrantes del gabinete municipal.
El intendente Carrizo, tiene un estilo que es marca registrada, es de poca palabras, situación que también la traslada a la interacción con sus colaboradores directos.
En las ultimas semanas el intendente realizó modificaciones importantes en cuanto al manejo de recursos. Le sacó, sin previo aviso, facultades que tenia el Secretario de Gobierno Juan Ignacio Acuña Kunz en la intermediación entre el municipio y fundación Santa Cruz sustentable y cooperativas. Desde ahí la relación entre el intendente y el funcionario se rompió.
La semana será decisiva y es muy posible que el municipio se quede sin un funcionario importante en cuanto a la gestión política. En las próxima horas el Secretario de Gobierno Juan Acuña kunz le presentaría la renuncia al intendente Pablo Carrizo.