
Desde las instalaciones del mayorista Diarco, ubicado en el corazón de la disputa, Maximiliano Zapata, referente local de la Unión del Personal de Seguridad y Afines de la Patagonia (USAP) que nuclea a trabajadores de seguridad, expuso en el movil de La Vanguardia Radio las preocupaciones de los trabajadores y el reclamo unificado entre tres provincias, por la reducción de cargas horarias y la contratación de policías en lugar de personal de seguridad privada.
El reclamo, que involucra a tres provincias; Río Negro, Santa Cruz y La Pampa, se centra en la decisión de la empresa de reducir drásticamente las jornadas laborales. Zapata explicó que, tras una primera reducción en enero, de 24 a 16 horas semanales y ahora se planea reducir a solo 8 horas a partir de febrero, dejando a varias familias sin ingresos estables.
La contratación de policías para labores de seguridad privada agrava la situación, pues no solo implica la pérdida de empleos en el sector de la seguridad privada, sino que también plantea preocupaciones sobre la calidad y naturaleza del trabajo policial en este contexto.
A pesar de los esfuerzos por dialogar con la empresa, los trabajadores no han recibido respuestas satisfactorias ni muestras de voluntad para negociar. Zapata enfatizó la disposición al diálogo por parte de los trabajadores, pero lamentó la falta de reciprocidad por parte de la empresa.
El conflicto no solo impacta en las fuentes de empleo directamente afectadas, sino que también plantea interrogantes sobre el rol de la policía en labores de seguridad privada y la necesidad de proteger los derechos laborales en el sector. La resolución del conflicto podría depender de la intervención de las autoridades laborales provinciales y de un compromiso genuino por parte de la empresa para buscar soluciones que protejan los empleos y garanticen condiciones laborales justas para todos los trabajadores involucrados.