
María del Carmen Carrizo, rectora del Colegio 42, comentó que se solucionó parcialmente el problema de la energía eléctrica en aulas.
Pero la situación se complicó porque la oficina de profesores y preceptores, que es de pequeñas dimensiones, ahora es utilizada para dar clases al grupo de alumnos de Primer Año, y los docentes tuvieron que quedar trabajando en la galería.
"Se solucionó el problema de la luz a medias, porque no era sólo el balastro, sino también el cableado. Ahora, al tener sobrecarga, salta la térmica y quedan sin luz tres aulas. Está un rato encendida la luz y se vuelve a sobrecargar", dijo Carrizo.
"Igual, eso está medianamente solucionado, pero seguimos con el problema del aula de quinto año. Y por eso tuvimos que desalojar de la sala de tutorías a los preceptores, la cual tiene dos metros y medio por dos metros de superficie. Están todos los chicos amontonados. Es muy feo dar la clase ahí, porque ni siquiera tienen pizarrón. Y los preceptores quedaron en la sala de emergencias con sus armarios. Es lamentable cómo estamos trabajando", describió la docente.